El funcionamiento bioclimático de una vivienda es ya un aspecto tan importante como el diseño, la funcionalidad o la calidad de los materiales en el desarrollo de un proyecto. En los últimos años el valor de la eficiencia energética de los edificios ha sido tomado en consideración convirtiéndose en uno de los bastiones de la nueva arquitectura sostenible. En Mas Arquitectura compartimos este posicionamiento teórico y apostamos por llevarlo a la práctica. Cómo?
• Orientación de la vivienda: Una orientación sur nos garantiza una mayor entrada de luz solar en invierno. Un porche nos ayuda a regular la afectación de radiación solar impidiendo que en verano los rayos -70º- penetren en el interior de la vivienda. Es importante además ubicar los huecos de la vivienda considerando cada una de las orientaciones puesto que las características de cada fachada son diferentes en función de cómo incide el sol.
• Aislamiento: Una hoja interior de ladrillo con una capa de aislante de al menos 6 centímetros y un aislamiento de 8 centímetros en cubierta son algunas de las recomendaciones para reducir considerablemente el consumo de energía de la vivienda. Un forjado sanitario ventilado nos ayudará a controlar la humedad del terreno y evitar la acumulación de gases. Asimismo, podemos optar por materiales pesados para los suelos para dotar a la vivienda de mayor inercia térmica.
• Ventilación: El sistema de ventilación contribuye a mantener un ambiente interior con menor humedad, lo que evita condensaciones interiores y mejora la calidad del aire que respira. Al calentarse y cargarse de humedad el aire asciende buscando superficies con menor presión, por lo que buscamos un efecto "chimenea" que facilite la circulación de aire interior, una renovación más eficaz, al tiempo que evita la aparición de manchas de humedad al evacuar el aire más húmedo.
• Energías renovables: Paneles fotovoltaicos, energía geotérmica o aerogeneradores domésticos son una buena opción para reducir el consumo energético de nuestra vivienda, lo que se traduce en un importante ahorro económico. Asimismo, instalar una chimenea de leña, con un alto rendimiento calorífico, puede ser una alternativa a los sistemas actuales de calefacción. Para ello, sería ideal contar con una chimenea con derivación de aire caliente hacia las habitaciones.
• Lucernario: Instalar ventanales o lucernarios nos permite aumentar la entrada de luz a la vivienda. De esta manera, es posible conseguir que todas las estancias cuenten con iluminación natural.
Estos son sólo algunos de los criterios a seguir para garantizar la sostenibilidad bioclimática de nuestra vivienda, una prioridad en cualquier proyecto actual.